Los libros y e-books que he leído hasta ahora, coinciden en tres situaciones: a) hay que pagar el precio, es decir estar compenetrado, empapado de que eso es lo que uno quiere, estar dispuesto a sacrificarse, invertir tiempo y tal vez algo de dinero para alcanzar ese sueño; b)tener fe, es decir creer que la decisión ha sido la correcta y que pase lo que pase, se lograra la meta o el objetivo; c)estar dispuesto que una vez que se alcance ese objetivo, esa meta o se cumpla ese sueño, compartir ya sea con la familia, personas necesitadas parte de los beneficios de ese sueño, es decir, hacer la caridad, donar a instituciones, patrocinar eventos caritativos, etc. Precisamente aquí reside la mención de que no sirve el dinero de nada si no se comparte. Ejemplo de esto tenemos muchos, Bill Gates, Warren Buffet, etc., entre más ganan mas comparten, mas dinero donan a la caridad.
Como mencionaba anteriormente mi sueño (y tal vez el de alguno de ustedes), es tener un negocio por Internet. Sin embargo al leer varios libros y examinar diferentes tipos de negocio, he llegado a una conclusión personal que el mejor negocio es el de multinivel. Ya que en la medida que uno ayuda a los demás a realizarse a ganar dinero, ellos le darán dinero a la persona que los ha introducido a esta modalidad. Aquí lo importante es que ese negocio tiene que ser de una empresa probada, segura, responsable y comprometida con el medio ambiente, ofrecer un producto que genere valor agregado a los usuarios o que les aporte mas beneficios que el dinero pagado por el. Además tiene que tener un sistema de compensación o de comisiones por niveles y por ventas. De nada sirve que el producto ofertado este igual en valor que el mercado normal, ya que la ventaja del multinivel es que se evitan toda la distribución que es la que encarece realmente al producto.
De acuerdo con el autor Miguel Ángel Spezzia en su libro El negocio que esta haciendo más millonarios en el mundo, dice que uno con un empleo normal tiene ingresos lineales, es decir, si trabajas cobras, si no trabajas no cobras. Desgraciadamente nuestros padres y nuestras escuelas, la educación que nos han dado es para ser trabajadores, no hay metas comunes, un trabajador tiene a un patrón y el patrón al trabajador. No existe algo malo en esa relación sino que de esta forma siempre será un trabajador y realizará un trabajo para otros y de esa forma uno permite, al tener un ingreso fijo, que otra persona decida el estilo de vida de nosotros, es decir, con ese salario se aspira nomás a cierto estilo de vida y no el que uno sueña. Al decidir el sueldo, el patrón, indirectamente decide que tipo de auto tener, la casa, la ropa, la diversión, la escuela de los hijos, de esta forma se esta expuesto a que los imprevistos afecten la economía e incluso se llega a perder todo lo que se tiene. Lo otro es que si nos despiden, perdemos el salario y adiós a todo lo que nos proporcionaba ese sueldo. En pocas palabras de esta forma nunca se llegara a ser rico y tener abundancia de dinero.
Por lo tanto nosotros tenemos la capacidad de elegir el estilo de vida que queremos, es decir, que auto manejar, en que casa vivir, en que escuela estudiaran nuestros hijos, donde serán las siguientes vacaciones, que ropa elegir, etc. Esto significa tener tiempo de realizar lo que más se desea, tener salud, tener dinero para disfrutar la vida.
Cuando éramos niños soñábamos con tener carros, casas, vacaciones, abundante dinero y ahora ¿que pasa con nuestros sueños, porque no soñamos igual?, ¿dónde quedaron?, muchas veces nuestra realidad económica se encarga de aplastar nuestros sueños y nos obliga a ajustarlos a nuestros ingresos y ante ello solo tenemos dos opciones: a) desinflar nuestros sueños o b) tener más dinero. El que desinfla sus sueños se convierte en conformista y el que aumenta sus ingresos se da el tiempo para seguir soñando y creciendo con ellos.
¿Cual será entonces la solución a estas situaciones? Los ingresos residuales y de estos hablaremos el día de mañana.
lunes, 2 de junio de 2008
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